Pautas para un maquillaje profesional

Aunque parezca que no, no todas las mujeres son diestras con el maquillaje. Muchos dicen que no hay nada más hipnótico que ver cómo un maquillador profesional despliega un estuche lleno de brochas y pinceles de todos los tamaños, formas y colores. Suele sacar uno a uno casi sin mirar, se sabe las posiciones de memoria, y después de untar el producto y probar un poco de él sobre la mano, dibuja formas geométricas, ovaladas o curvas sobre rostros pálidos y bellos. Por eso podemos intentar emular en casa la precisión y destreza con la que los maquilladores y peluqueros utilizan sus herramientas. Pero, avisamos, el resultado será casi con un 99% de probabilidad un lamentable error. Lo mejor es hacerse con unos cuantos básicos: tres tipos de brochas, un cepillo que se adecúe a nuestro cabello y las limas y pulidores más aptos para nuestras uñas. Con este kit de belleza y nuestros consejos el resultado final será perfecto. ¿Qué brocha elijo?. Muchas veces la perfección está en los pequeños detalles, y eso en maquillaje se traduce en un concepto: los utensilios de belleza. Pero, ¿cómo elegir las brochas y pinceles más adecuados? ¿Qué diferencias existen entre las brochas de pelo natural y las de cerdas sintéticas? "Se debe elegir el tipo de brocha según el maquillaje que se vaya a utilizar. Así, las brochas de fibras naturales, como las de pelo de cabra, son más recomendables para aplicar los polvos sueltos mientras que las sintéticas son más convincentes para las bases líquidas o cremosas, ya que proporcionan un acabado más uniforme", señalaban los profesionales de Givenchy en Vogue Belleza. En la ciudad de Santa Cruz se puede acudir a Cosmet y a la perfumería Fragance para encontrar el set adecuado. Pinceles para todos. Y aunque las brochas de maquillaje más utilizadas son las que usamos para el colorete y los polvos compactos, hay muchas más que te facilitarán un maquillaje de cine y un acabado intacto. Por ejemplo, seguro que usas para tus sombras de ojos una brocha con almohadilla y no un pincel que te permita cargar tu mirada de todo el color y la luz que necesitas.