Aguanta el calor intenso sin sufrir

Los calores fuertes suelen ser peligrosos para la salud de algunas personas, mayormente para los niños y los mayores. Por lo tanto, es importante adoptar algunos gestos para impedir que tu hogar se vuelva un horno.

Con el calentamiento climático, las subidas de temperatura se vuelven más frecuentes e intensas. El cuerpo humano posee mecanismos que le permiten evacuar el calor. Las afecciones relacionadas con éste aparecen cuando estos dispositivos se vuelven insuficientes o si se inhiben. En estos momentos, aparecen efectos directos como calambres musculares, mareos, deshidratación, cansancio, entre otros, pero también consecuencias indirectas que pueden causar que se agrave una enfermedad crónica, tal como una afección cardiovascular, respiratoria, renal, neurológica o diabetes. Generalmente, las secuelas indirectas son más frecuentes.

Toda persona puede sentir y sufrir de los efectos del calor. Sin embargo, algunos individuos presentan más riesgos, ya que su cuerpo no se acostumbra a las subidas de temperatura. Entre éstos encontramos las personas mayores, las que padecen enfermedades crónicas o mentales, las que presentan adicciones, pero también, los niños y la gente que vive sola o que ha perdido su autonomía. Asimismo, se debe prestar atención a las mujeres embarazadas.

¿Sabías que?

Malestares

CuÁndo aparecen

Algunas personas son más sensibles que otras a los efectos del calor. Sin embargo, para la mayoría de la gente, las indisposiciones relacionadas con el calor se manifiestan cuando las temperaturas son elevadas durante un par de días, particularmente si éstas no bajan de noche. Asimismo, la humedad es un factor agravante. Se debe evitar permanecer por mucho tiempo en el exterior, debido a que una exposición excesiva puede provocar trastornos como golpes de calor, agotamiento y calambres.

Otros trucos

Aumenta tu bienestar

VENTILADOR

No lo uses si la temperatura es superior a los 30 grados, ya que en este caso, solamente va a remover el aire sin refrescarlo. Si tienes climatización, préndela en los momentos más cálidos. Intenta encontrar un lugar fresco.

CASA

Habilita tu vivienda para evitar la entrada de calor. Cierra tus ventanas y cortinas durante el día y ábrelas de noche. Si tu casa posee dos pisos, deja abiertas las ventanas del último para que salga el aire caliente y exista mayor ventilación.