Para muchos, la sensualidad pasa por la belleza de esta zona del cuerpo, por lo que su cuidado es esencial para conquistar y consentirse. Hombres y, por qué no, también mujeres, prefieren amantes con unos pies hermosos y cuidados. Hasta existe un tipo de fetichismo, la podofilia, definido como pasión erótica o excitación sexual por los pies, un placer compartido tanto por gente común como por famosos como Andy Warhol, de quien se dice tenía un pie momificado en su mesa de luz. También es conocido que Elvis Presley descalzaba a sus conquistas antes de hacer el amor; y, en tierra patria, hay casos como el del cantante Carlos Baute, quien ha reconocido su predilección por esta parte del cuerpo. En la gran pantalla, un caso emblemático es el del director Quentin Tarantino, quien reiteradamente ha incluido primeros planos de pies mayormente femeninos en sus filmes. Así es que mujeres y hombres, actualmente acuden hoy a centros de estética, para realizarse una pedicure profesional.
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